Hacía
mucho tiempo que no volvía a sentir esas buenas vibraciones como las había sentido
alguna vez. Volver a estar feliz porque todo funciona, todo va por el buen
camino y que pueden venir trescientos problemas porque me los voy a comer con
la sonrisa más grande del mundo. Es entonces cuando te das cuenta que tu otro tú
no está, y tus inseguridades, tus miedos y temores tampoco, que se han echado a
un lado para que salga tu nuevo tú, diferente al de hace unos meses y muy
diferente al de dentro de unos cuantos meses más.
Ese
miedo que te consumía a veces y no te dejaba hacer ciertas cosas, ese miedo que
te atrapaba y no te dejaba salir (ser tú mismo). Pero tener miedo no es algo
malo, lo malo es dejar que el miedo te domine, porque ¿cuántas decisiones en tu
vida cotidiana tomas por miedo? ¿Cuántas cosas has hecho o has dejado de hacer
por miedo?
Ahora
mismo estoy echando de menos ciertas cosas del pasado y quizás tengo miedo a lo
desconocido y futuro, pero el tiempo es el tiempo y, como tal, sólo es uno y viaja
en una línea continua y sin pararse y no podemos perder la vida por miedo. Si
algo he aprendido en este tiempo es que tenemos que liberarnos del miedo,
darnos permiso y comenzar a crear posibilidades y oportunidades en vez de
esperarlas.
Muy buenas Javi me ha gustado mucho tu publicación comparto mucho tu pensamiento ya que por miedos o inseguridades en muchas ocasiones hemos dejado de hacer algo y a dia de hoy nos arrepentimos, el pasado ya no lo podemos cambiar pero si el futuro que esta aún por escribir en la que tendremos montones ocasiones de no volver a cometer los mismos errores y aprovechar esas oportunidades como tu bien comentas. Un saludo y buena publicación.
ResponderEliminarSiempre tenemos oportunidades de hacer las cosas bien, y no debemos dejar que el miedo nos atrape porque hay que aprovechar todas las oportunidades que nos ofrece la vida.
EliminarUn saludo Antonio.
¡Buenas tardes Javier! Comparto lo que dices y añado algo más . En la mayoría de las ocasiones el causante del miedo es la inseguridad y el qué dirán, por eso tenemos que pensar en hacer lo que queramos; el pasado , pasado está y el futuro está por venir. Compórtate como tú quieras, no como la sociedad espera que te comportes. Me ha gustado mucho , un saludo.
ResponderEliminarTe doy toda la razón, Carlos, finalmente tenemos que hacer lo que realmente queremos, porque primero vas tú y luego va el resto.
EliminarUn saludo y gracias.
¡Buenísimas tardes Javier!
ResponderEliminarMe ha sorprendido muchísimo haber encontrado en tan poca extensión las palabras adecuadas.
Desde mi punto de vista, el miedo suele jugar siempre una mala pasada. Cuando iniciamos una mala racha, nos acostumbramos al malestar y bloqueamos nuestra valentía, huyendo de intentar las cosas por si fracasan, ya que lo hicieron la otra vez.
Estamos tan amoldados a que todo vaya mal, que cuando algo bueno pasa nos ponemos en alerta porque el hecho de que todo vaya sobre ruedas suele parecernos raro.
Como bien dices, y lo que más me ha gustado de tu publicación, el miedo no es malo, solo hay que saber sobrellevarlo y no permitirle ganar la batalla.
Un saludo.
Al fin y al cabo el miedo está en nuestra mente, y sólo nosotros decidimos si nos invade o si nos acompaña a hacer las cosas. Sólo hay que arriesgarse, y, si nos equivocamos, pues no importa, se sigue hacia adelante, sólo hay que confiar en uno mismo y todo saldrá bien.
EliminarUn saludo Laura.